«Para aclarar responsabilidades en los atentados de cualquier sitio, una reflexión metafórica:
Es verdad que quien dispara es siempre el asesino. Pero también es verdad que si el cuadro político dirigente de la fábrica del chaleco antibalas que supuestamente protegía a quien lo portaba no hizo bien su trabajo y por eso los proyectiles llegaron al cuerpo del difunto ese cuadro político es también responsable de la muerte del individuo. No es necesariamente lo mismo autores que responsables y cada uno es siempre culpable de la parte que le toca. No en vano en todos los códigos de justicia hay actos reprobables por acción u omisión. Asumir responsabilidades es señal de madurez e inteligencia. Y no son precisamente los tejedores del chaleco los que lo diseñan mal, pues sólo siguen instrucciones de los directores de la fábrica, preocupados en casi todo menos en hacer bien su trabajo.
Por cierto, mis más efusivas y emocionadas felicitaciones a los valientes y eficaces tejedores en todas partes del mundo. Es un orgullo poder disponer tan magníficamente de su protector abrigo así como de su eficacia remendando in situ los agujeros que muchos de sus –en el mejor de los casos– ineptos jefes van provocando en nuestro tejido social y vital.» [Agustín Barahona]
_____________
Véase también:
Hasta ahora las cinco decisiones controvertidas de los Mossos tras los atentados de Barcelona:
Tienes que Iniciar Sesión